En numerosas ocasiones, siempre encontrará ese tornillo oxidado que simplemente no se mueve y pensará: ojalá supiera cómo quitar un tornillo oxidado. Afortunadamente, nuestro equipo de expertos en bricolaje ha descrito una serie de métodos diferentes con el fin de eliminar ese molesto tornillo oxidado.
Los tornillos oxidados son el resultado de la reacción de la humedad y el aire, que hace que el tornillo se atasque. Esto es inevitable en la mayoría de las situaciones, ya que no se puede evitar la humedad, especialmente en cualquier cosa que se utilice en el exterior. Por lo tanto, saber cómo eliminarlos es una habilidad inestimable.
Equipo necesario para retirar un tornillo oxidado
El equipo necesario para quitar un tornillo oxidado varía mucho en función del método que utilice. Como es probable que el equipo del que disponga varíe, hemos ideado una serie de soluciones diferentes que pueden llevarse a cabo con distintos niveles de equipamiento. Aquí tiene una lista de las herramientas y el equipo necesarios para probar todos estos métodos.
- Martillo
- Spray penetrante de óxido o lubricante
- Extractor de tornillos
- Dremel o sierra giratoria
- Soplete térmico
Solución 1: Martillo y lubricante
Este método es el primero al que se recurre para extraer un tornillo oxidado. Es el método más sencillo y el que requiere menos equipo especializado.

- Golpee la cabeza del tornillo con el martillo 2 ó 3 veces para romper el sello de óxido.
- Añada al tornillo un penetrador de óxido o un lubricante común como WD-40 o incluso un producto doméstico como Cola o vinagre, ya que aliviarán el óxido.
- Golpee el tornillo una vez más para permitir que el lubricante se extienda a las roscas.
- Dejar reposar unos 10 minutos.
- Intente de nuevo desenroscar el tornillo oxidado.
- Repita la operación hasta que pueda retirar el tornillo.
Solución 2: Herramienta extractora de tornillos
Existen varios extractores de tornillos en el mercado que pueden ser muy eficaces para extraer tornillos oxidados y tornillos atascados. Estas herramientas suelen ser eficaces para extraer tornillos oxidados con bastante facilidad. Este método no es la primera opción, ya que daña el tornillo y no se puede reutilizar.

- Taladre la cabeza del tornillo oxidado con la herramienta extractora.
- Gire la herramienta extractora.
- Pon el taladro en marcha atrás y saca el tornillo oxidado.
Solución: Añadir una ranura a un tornillo pelado
Los tornillos pelados pueden producirse cuando los tornillos oxidados que no giran se pelan con un destornillador que ofrece demasiado par de apriete. La solución a esto es añadir una ranura plana en la cabeza del tornillo para que se pueda quitar con un destornillador de cabeza plana que pueda soportar más par de apriete.
- Utiliza una Dremel o una sierra giratoria para hacer una nueva ranura recta en el centro de la cabeza del tornillo.
- Retire el tornillo con un destornillador plano.
Solución 4: Aplicar calor
El calor es otra opción que puede utilizarse para aflojar un tornillo oxidado y poder extraerlo. Sin embargo, este es el último recurso para quitar un tornillo oxidado, ya que el calor puede dañar varias cosas, incluido el tornillo y su entorno.

- Utilice un desengrasante de limpieza para asegurarse de que la zona está limpia de todos los productos inflamables.
- Aplique calor al tornillo con el soplete hasta que humee.
- Aplique rápidamente agua fría con un trapo para enfriar el tornillo.
- Repita este proceso hasta que el tornillo pueda retirarse con un destornillador.